Mi nombre es Davinia, y soy psicóloga especializada en el campo de la psicología jurídica y forense. Cuento con una sólida formación académica y una amplia experiencia de más de cinco años en este área.
Tras mi formación en psicología clínica, me especialicé en el ámbito forense con el postgrado «Experto Universitario en Psicología Legal y Forense. Dinamica Pericial» en la Universidad de Valencia. Durante mi formación, adquirí un profundo conocimiento sobre los fundamentos teóricos y prácticos de la psicología aplicada al ámbito judicial. Esto incluye aspectos como la evaluación psicológica, la entrevista forense, el diagnóstico de trastornos mentales, la psicopatología y la personalidad, la valoración de daño y secuelas psicológicas, y la elaboración de informes periciales.
Al finalizar mis estudios, tuve la oportunidad de trabajar en diversos contextos forenses, colaborando tanto con instituciones públicas como con despachos de abogados y organismos judiciales.
Durante estos más de cinco años de experiencia, he intervenido en casos de diversa naturaleza, desde evaluaciones de la competencia parental en casos de guarda y custodia, hasta peritajes en casos de maltrato, violencia de género y agresiones sexuales.
La psicología forense, también conocida como psicología jurídica o legal, es una rama de la Psicología que se aplica en ámbitos de Derecho. Como psicóloga forense realizo informes periciales en Valencia centrados en:
Tras nuestro primer contacto, estableceremos una fecha para realizar una entrevista telefónica (o presencial, si se considera conveniente) en la que conocer a fondo las características de tu situación y así podremos valorar la viabilidad del informe.
Será un momento en el que podamos orientarte con mayor fluidez y responder a todas las dudas que puedas tener.
Una vez se haya determinado que el caso es viable, se te enviará un presupuesto detallado.
En este momento, también recibirás documentación acerca de las condiciones que ambas partes asumimos al comenzar con el proceso de elaboración del informe pericial psicológico.
El proceso de elaboración del informe pericial comienza con una primera entrevista forense que consta de dos partes:
El número de entrevistas y de pruebas psicométricas variará en función de las circunstancias y necesidades que requiera tu caso.
Es posible que además de evaluarte a ti, también se necesite recabar información por parte de terceras personas.
En esta fase se realiza un proceso de análisis de toda la información obtenida durante el proceso de evaluación forense, así como la documentación judicial.
A través de la experticia forense se concluyen una serie de resultados que responden al objeto del informe, apoyados en los fundamentos teóricos pertienentes.
El informe psicológico pericial se entregará de forma prioritaria en una cita presencial y se acompañará de una devolución oral, en la que se explicarán detalladamente las conclusiones obtenidas.
También será un momento para poder resolver todas las dudas que puedan surgir.
Si se requiere, iré a la sede judicial para ratificar de forma oral las conclusiones plasmadas en el informe pericial.
En este momento, tanto el juez/a como los/as abogados/as podrán realizarme preguntas, que responderé con diligencia y siempre apoyándome en la evidencia empírica oportuna.
Si necesitas solicitar un informe pericial para un proceso judicial, ponte en contacto conmigo mediante el siguiente formulario para estudiar tu caso a fondo y llevar a cabo el informe psicológico necesario.
La actuación del psicólogo forense consiste en aplicar los conocimientos técnicos de la Psicología en el estudio de las personas que se encuentran involucradas en sucesos o procesos judiciales con el fin de asesorar a los jueces y a los tribunales al respecto del caso.
Es decir, el psicólogo forense actúa en calidad de perito para el juzgado y su misión se centra en explorar, evaluar y diagnosticar las pautas de interacción, aspectos de personalidad, inteligencia, aptitudes, actitudes y otros aspectos de esta especialidad de las personas implicadas en los procesos judiciales de quien se solicite un informe psicológico.
Durante el llamado periodo probatorio, las partes implicadas en un proceso judicial pueden proponer al juez las pruebas que estimen convenientes o necesarias, entre ellas, un dictamen de peritos.
En este sentido, un profesional de la psicología acreditado en psicología forense puede actuar como perito del caso y realizar un informe psicológico. El psicólogo perito realiza dicho informe psicológico cuyo nombre técnico sería prueba pericial (también llamada pericia, peritaje o peritación).
La prueba pericial, es decir, el informe psicológico emitido por el psicólogo perito, es una declaración de conocimiento sobre los hechos de autos, cuando para las probanzas son necesarios o convenientes conocimientos científicos del área de la Psicología.
Lo primero es contactar con un psicólogo/a acreditado/a en Psicología Forense y acordar fecha y hora para realizar la entrevista o entrevistas necesarias.
La entrevista suele consistir en una parte de preguntas guiadas por el psicólogo o psicóloga, y otra parte de cumplimentación de las pruebas psicométricas que la persona profesional considere oportunas.
Una vez recogida la información necesaria, el psicólogo o psicóloga forense procederá a analizar la información y redactar el informe, el cual habrá de ser entregado con tiempo prudencial a la vista.
El informe resultante de la prueba pericial generalmente consta de los siguientes apartados:
La competencia del dictamen emitido por el psicólogo perito a través de la prueba pericial es ilustrar, asesorar y aportar conocimientos al proceso judicial. En ningún caso las conclusiones de la prueba pericial son vinculantes para el juez. El juez puede prescindir de sus conclusiones de forma razonada, en cuyo caso debe expresar en la sentencia los motivos por los que rechaza la prueba pericial.
El informe de parte es solicitado por una de las partes, sin intermediación del juzgado, mientras que el informe judicial es solicitado por una de las partes, por el juez o por el fiscal, dentro de los cauces legales.
El informe de parte ha de ser sufragado por la persona que lo solicita. El informe judicial puede ser de oficio o con provisión de fondos, dependiendo de quién lo solicita.
En el informe de parte se valora a la persona que lo solicita mientras que en el informe judicial se valora a todas las partes implicadas, a no ser que expresamente se solicite realizarlo de otra forma.
